Mitos desinformados sobre el Maestro Gichin Funakoshi

Mitos desinformados sobre el Maestro Gichin Funakoshi

Muchos ya saben bastante sobre el Maestro Funakoshi, pero aún así también se puede encontrar una gran cantidad de datos erróneos y suposiciones sobre limitada información que puede confundir al público. Considerando que O-sensei ya no está entre nosotros es deber de aquellos que tienen acceso a un poco más de información tratar de erradicar mitos de gente desinformada o malintencionada.

Gichin Funakoshi sensei nació en 1868 en el barrio Yamagawacho en la capital real de Okinawa, Shuri. Según nos cuenta en su autobiografía fue siempre un niño muy débil y enfermizo, a tal grado que su familia no pensaba que fuera a vivir mucho tiempo. En el colegio tuvo la fortuna de ser compañero del hijo de Yasutsune Azato (en japonés Yasutsune se pronuncia Anko) el más respetado y uno de los mayores expertos del arte de karate en la isla. Comienza su práctica con él y en algunos años se había transformado en uno joven fuerte y con una excelente salud. Este sería el inicio de una carrera en karate que lo transformaría en el más famoso de los karatekas Okinawenses. Entre sus más importantes maestros contamos a Azato, Yasutsune Itosu y Sokon “Bushi” Matsumura.

Quisiera analizar un poco acusaciones infundadas que muy a menudo se encuentran en diversos sitios web, especialmente de estilos que en algún momento estuvieron relacionados con el karate de Gichin Funakoshi. Se lee a menudo que Gichin Funakoshi sensei no era un buen karateka y que sólo debido a su cultura y dominio del idioma japonés le fue posible expandir el karate en Japón. Cito un caso típico de aquellas injurias:

Funakoshi en Okinawa no era un gran karateka, sino más bien un karateka del montón… En Japón a Funakoshi le “sonó la flauta”, como suele decirse, y tuvo la suerte de popularizar el karate”. Salvador Herraíz, Wado-ryu

Primero que todo, es de muy mal gusto hablar así de un maestro tan respetado pero más allá del tacto que debiera de mostrarse están los hechos. Se que de alguna manera hubo una ruptura molesta entre Gichin Funakoshi y Hironori Ohtsuka cuando Yoshitaka Funakoshi tomó la sempaitura del dojo Shotokan y esto en cierta manera explicaría que sus alumnos posteriores hablen mal de él, retransmitiendo ese malestar de sus maestros, pero esto es sólo una suposición. ¿Qué hay de cierto en las acusaciones?

El primer hecho es que Gichin Funakoshi en las primeras décadas de los 1900’s fue presidente de la Okinawa Shobukai (Asociación Marcial de Okinawa). Pregunto ¿A quien escoge una asociación de artistas marciales para la presidencia, a un artista marcial “del montón”, o al mejor o uno de los mejores exponentes? La respuesta es obvia. Entiendo que hayan envidias pero es necesario atenerse a la verdad.

En 1906 Gichin Funakoshi y algunos de sus amigos formaron un grupo para realizar demostraciones de karate alrededor de Okinawa, esta debe haber sido la primera vez que públicamente se exhibía karate. En particular estuvieron presentes en la ceremonia inaugural del entonces nuevo edificio de la prefectura, a las cuales estaban invitados muchas personalidades. Gichin Funakoshi fue instado a dirigir un grupo de grandes maestros de karate en una demostración de ese arte único. El Maestro Funakoshi fue además el primer experto en introducir el karate a las islas principales de Japón, pues en 1916 realizó una demostración en el Butokuden, en Kyoto, que en ese momento era el centro oficial de todas las artes marciales.

En 1922 Gichin Funakoshi sensei fue invitado a Japón para un evento muy importante la Primera Gala Gimnástica Nacional en Tokyo en la que se le pidió que realizara una exhibición. Esta tuvo mucha aceptación y fue la razón por la cual O-sensei decidió radicarse y expandir el Karate en las islas principales de Japón.

Finalmente si consideramos la gran cantidad de importantes alumnos que tuvo el maestro Gichin Funakoshi queda enfatizado el hecho que el Maestro Funakoshi no era del montón sino de un grupo muy privilegiado del Karate que juntos lograron expandir el karate a nivel mundial. Esto no se podrá empañar ni con injurias ni con palabras necias.

Osu O-sensei.

20 de Septiembre, 1998